Postrado hoy, el declive de Abdelaziz Bouteflika, dueño de Argelia desde 1999, lo es también del país de las palmeras datileras. La crisis financiera ha llevado a la corte del eterno presidente a ponerse en manos de la petro monarquía saudí. Atrás parecen quedar los conflictos entre Riad y Argel a causa de la agresión militar saudí en Yemen. La petro inversión y el dinero del Golfo bien vale una oración. Como informa Mondafrique.com, la reconciliación comenzó este pasado febrero en el transcurso de la 12ª comisión argelino-saudí. Una importante cohorte de hombres de negocios, liderada por el ministro de inversión y comercio del reino saudí, Madjid Ben Abdallah Al Qassabi, desembarcó en Alger como Mr. Marshall en la Europa de los 50.
Huele a Fosfato
Desde los cafés de Argel hasta los oasis del desierto, se lanza al aire una pregunta a lo Vargas Llosa en su Conversaciones en La Catedral: quién jodió Argelia, o… dónde está el dinero del país. Se sabe que el del plenipotenciario Bouteflika reside cálidamente en Panamá.
En el cálido febrero argelino, la alfombra roja se desplegó para la cohorte saudí que inyectará petrodólares en la industria de transformación de fosfato, del papel y de infraestructuras en el sector de la sanidad.
Todo un plan para parar la creciente desafección de una juventud argelina sin empleo que puede seguir el ejemplo pasado de la tunecina o egipcia. Salvo que las barbas de la mansión Bouteflika se han puesto a remojar en aguas quizá muy sala..fistas.
Turismo salafista
Otro de los sectores donde los saudíes invertirán sus petro esfuerzos es en el turístico hotelero. Una incognita explota. Las guerrillas apoyadas por la monarquía saudí han atacado hasta ahora los complejos hoteleros en todo oriente. Puede que Argelia se convierta en un Las Vegas halal de relax para las sucursales wahabbitas saudíes. Argelia venderá 65 hoteles públicos. El ministro argelino de industria, Abdesslam Bouchouareb, hace una verdadera danza del vientre y ofrece levantar hacia el cielo «todos los obstáculos».
Los compromisos políticos
Oficialmente, el objetivo del gobierno de la maison Bouteflika es aumentar el volumen de negocio e intercambio en cerca de 15.000 millones de petrodólares en el curso meditarráneo de 10 años. El «levantamiento de los obstáculos» que anunciaba el ministro de industria tiene una primera traducción: los imanes salafistas, los preferidos del régimen saudí, no son controlados en las mezquitas argelinas. La hermandad El Ahmadite, considerada por los saudíes como una secta peligrosa que amenaza su ideología, está siendo desmantelada por los servicios de seguridad argelinos. Al mismo tiempo, Bouteflika poco a poco toma sus distancias con Teherán. El precio a pagar por la oración mirando a Riad.