Los eurodiputados han aprobado un informe que considera el polen de la miel más como un «componente» que como «ingrediente». La diferencia no es baladí ni para quienes gusten de la miel ni para los productores … de polen transgénico. En juego está que en los botes de este producto apreciado por osos y humanos aparezca en su etiquetado la advertencia de polen transgénico. Hasta ahora, siendo un ingrediente de la miel, si la cantidad de polen transgénico llegaba al 0,9%, en el envase debía aparecer un etiquetado advirtiendo de su existencia. Al pasar a «componente», el 0,9% de contenido transgénico pasa a ser de todo el producto. En la miel, el contenido de polen ronda el 0,5%.
La Corte Europea dictaminó en 2011 que el polen era un ingrediente de la miel. La Comisión propuso considerarlo un «constituyente». El reciente voto del parlamento europeo viene a ratificar esta maniobra terminológica. La Unión Europea impirta el 40% de su miel de Argentina y Mexico grandes productores de organismo modificados geneticamente.