Se empeñan en cubrir la capa de aire de Bermeo con sus poemas. Ignacio Landa y Mario Neta enlazan su respirar a la escritura. Pareja binaria y compás de dos por dos. En el puerto amarran sus versos anhelados pesqueros en busca y captura de un pasado, y barcos de recreo que amuran otros rumbos. Ambos arrastran motivos para tocarse. La nave de los locos captura lo que hay más adentro. Aparece la poética que leva la carga fondeada con nuevos textos. Hincapié los saca de la internación para que lo que dicen pueda circular y medir su razón.
Uno
La vida es la que yo tengo
una vibración en el costado
que induce al respeto.
Inútil entre los hombres
el adorno, la floritura, el bluf
las palabras han temblado,
la boca sonreído
el corazón y las entrañas
se han puesto del lado
del pobre perseguido
soy a caso una manzana
pero inútil, he sido algo
que no existe
sino en el plano quimérico
en la magia del ojo tal vez
para conectar una manera que existió.
De ninguna manera ha sido posible
volver ahí,
solo me acuerdo
y no se dónde queda
aquel caldo de sueño que existió
y en la trampa se diluye,
la trampa de crecer y
llamarse adulto
que como un extremo con otro
se anudó con los años
a la forja de mis sueños.
Inútil el hombre así,
inútil entre los renglones torcidos de dios.
Tampoco dárselas de loco soñador y amante,
es su mundo el que corresponde
y es la vida que yo tengo
el único punto válido y suspensivo.
Pero la vida inaprensible
también a mí me ha deslumbrado.
Son el amor y la vida
sin una sonrisa
y nadie puede llamar cacareo a la risa franca.
Dos
Duele el ocaso
en el mes de Mayo al mediodía,
son ya muchos ocasos doliendo
como para no ceder a lo humano.
La pertenencia de mi cuerpo
guarda una antigua magia,
y el mundo sigue despacioso.
Te veo en mi recuerdo feliz
y paso el trago.
Tomo café.
Ignacio Landa
hospital
el infierno del pasillo
baldosas medicadas
puntal de cielo raso
nubes encaladas
entran en confines
de paso a paso.
muerte
labios pasan
de largo
dicen
por este pasillo
te llevaría
hacia a delante.
es inútil
la eternidad envejece
es una pena
imagina decir
a una esthéticienne
y sonríe
monótono
inexpresivo.
ahí arriba
el azul zapatea vacío
un baile inmensa negrura
sincronizado un encerado
claro escribe
en su lugar aquí abajo
correspondiente
(a la vez)
más alto
el espacio
Mario Neta
