Con la publicación de Moralidades actuales, se hace doble justicia con el bisoño, honesto y gran escritor proscrito que fue Rafael Barrett. Proscrito en el olvido en su pacimiento natal, la cántabra ciudad de Torrelavega, y la sociedad mojigata madrileña de finales del XIX; proscrito por los regímenes sudamericanos a los que combatió; y proscrito por el radicalismo en sus toscas manifestaciones que nunca le perdonaron su heterodoxia combativa, pero heterodoxia. Estos maravillosos artículos que compenden este libro fueron publicados por la prensa en la que colaboró tras exiliarse en Argentina, Paraguay y Uruguay a principios de siglo XX. Algunos sostuvieron la armadura del que sería el periódico que lanzaría, Germinal, para el combate, su combate, contra la casta paraguaya que desangraba a las gentes por un lado y al país por el otro. Ahora se publican en Pepitas de Calabaza tal como Barrett deseaba que se publicaran, salvando las malas interpretaciones partidistas y cicateras de más cien años de olvido.
Barrett es único. Único sucesor de Mariano José Larra. Huído de España por azotar con una fusta al intocable duque de Arión, íntimo de Alfonso XII, el peregrinar de Barrett por las tierras de Sudamérica le convierte, para fortuna, en el hombre que habla con la pluma y conciencia plena de los próximos a él y oprimidos. Porque la vida es un arma. Barrett se suma a la revolución paraguaya de 1904. Como el gran Bierce hizo con la mexicana o John Reed con la rusa. Su escritura, como dice Gregorio Morán en su Asombro y búsqueda de Rafael Barrett publicado en 2009, «hiere, lastima, lacera, incomoda».
Barrett es un socialista radical, tolstoniano, individualista ácrata frente al Estado y una sociedad adocenada y corrompida. Leer sus textos nos incomoda. Desde 1908 habla de las mismas miserias de la vida cotidiana que nos desordenan con indignado cinismo en 2014. Sus Moralidades actuales son, en efecto actuales.
«¡Oh burocracia! ¡Oh fealdad! ¿aventuras enjauladas por la higiene, torres de Babel aseguradas de incendios, nerones de levita usurera, milagros con tarifa, reos a quienes se toma el pulso, lujuria desinfectada, loterías benéficas, progreso en fin! Los moralistas escarban la uniforme corteza de la democracia; subterráneos, los arroyos negros de la maldad humana huyen. Y como las altas estrellas no reflejan en el barro endurecido su temblorosa imagen, los poetas lloran»
«Nos enseñó a escribir» dice Roa Bastos. Germinal exhala el empuje de nuevos tiempos, el de los trabajadores para salir de las tinieblas, un vuelo de la sociedad caduca hacia la primavera. En la aventura de Germinal están Barrett y el porteño José Guillermo Bertotto, el futuro encarcelado, torturado. Será la de ellos dos la rebeldía frente a la moral y las leyes:
«Nosotros mataremos la ley y reanudaremos el mundo»
En Germinal se denuncian las tropelías empresariales, las corruptelas de una casta que desangra Paraguay, quedan denunciados los monopolios, se suceden los grandes reportajes. En estas Moralidades actuales se suceden protagonistas, lacayos, víctimas.
Qué precio más alto paga el honesto como ningún otro Barrett que se niega a quebrar el brazo, la muñeca y el párrafo. Desterrado de Paraguay tras su denuncia de la explotación en los campos, los yerbales de mate, ha de alejarse de su esposa y su recién nacido hijo a los que no verá más.
Montevideo será su patria, la patria del reconocimiento. El Liberal, dirigido por Belén Sárraga – teósofa, feminista, agitadora en los campos andaluces, figura igual de silenciada que elpropio Barrett- publica buena parte de las columnas que integraran sus Moralidades.
Hereje también para los inquisidores rojos
Se reconoce como un cristiano sin iglesia: lo describe en un artículo dedicado a Cristo que los anarquistas de la editorial América Lee retirarán de sus obras completas (2). Sin embargo, y no por casualidad, Barrett va ser más valioso para el anarquismo, sobre todo en Argentina, que el anarquismo para Barrett. El movimiento ácrata, lleno de militantes y sindicalistas, carecía de figuras de semejante intelecto. Le irrita la alta consideración en que se tienen los porteños. Tampoco aquella Argentina ha cambiado tanto.
Su individualismo no oculta un desprecio por esa manifestación del pueblo resignado, de brazos caídos:
«Desposeído de mentiras grandiosas, se contenta con mentiras pequeñas ¡Desgraciados los que teneis llagas, porque no es faltarán moscas!».
¿También en la era de la democracia digital de las redes social?
Barrett rompe con el cliché romántico. Su modernismo es, en opinion de Morán, la vida como obra, estética y éticamente. Lejos de la visión de jardín de nenúfares que los académicos e historiadores de tres al cuarto han dado del primer modernismo español, «todo lo que tiene el modernismo de valiente, de luminosos y analítico, de verdadero, está en Barrett».
Imprescindibles, actuales hasta rasgarnos la propia moral, estas Moralidades actuales del descubierto Rafael Barret:
«Es el clima social lo que se transforma; ¡Aunque alceis entorno muros de diez millas nada detendrá la primavera»
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(1) Gregorio Morán Asombro y busqueda de Rafael Barrett, Angrama 2007.
(2) Idem
(3) La editorial Periférica publicó en 2008 Hacia el porvenir, en el que se recopilan los sigueintes textos: De estética (1905), Lo que son los yerbales (1908) y La cuestión social (1910).
Grandes disturbios ante la casa de la enfermera contagiada por Ébola ante la posibilidad de sacrificar a su perro, según las noticias podría haber mas casos de Ébola en Madrid ya en cuarentena…
Personalmente ya en el momento que estamos (y no solo por el Ébola), creo que no debe dimitir Ana Mato (ya es tarde e insuficiente), sino Mariano Rajoy y todo el gobierno y convocar rapidamente elecciones generales (las epidemias son competencia estatal, se gastaron millones para enfermedades pseudoficticias como la Gripe A y no se ha preparado al país para algo tan peligroso como el Ébola), si no se hacen estas elecciones hay que salir a la calle, pedir firmas por Internet, etc., hasta que se consiga, Rajoy (con mayoría absoluta) es el auténtico y único culpable de todo lo que le está pasando al país (suerte va a tener si no termina en un tribunal), ya es un hecho que estamos ante el peor presidente de España de toda su historia, España es cuestionada ya ante toda Europa y el mundo, esto ya es insoportable y no va a ser lo último, ¡Váyase señor Rajoy!, ¡Váyase PP!, Por España ¡Váyanse ya!.
QUE NADIE PIDA LA DIMISIÓN DE ANA MATO , DIMISIÓN DE MARIANO RAJOY Y DEL GOBIERNO EN PLENO Y ELECCIONES GENERALES , Y SI NO LO HACEN CADA VEZ QUE SALGA UNA NUEVA DE ESTAS A VOLVERLO A PEDIR CADA VEZ CON MAS FUERZA , ES LO ÚNICO QUE SE PUEDE PEDIR Y DE FORMA CONTINUADA , PARA TODO LO DEMÁS YA LLEGAMOS TARDE .
Esto del Ébola es toda una maravilla, además de la epidemia y de la gente a la que puede dañar, corre el riesgo de que se ponga en peligro la única industria que funciona en el país y la que le está salvando un poco ya de la ruina total, que es el TURISMO …, si amiguitos, si mañana desde los países que mandan turistas a España se corre la voz (como ya ha pasado otras muchas veces con otros países infectados) de que «por su seguridad desde nuestro gobierno se recomienda NO VISITAR ESPAÑA, vaya a otros países similares pero seguros…» (Sur de Francia, Italia, Grecia, etc.), no se si nos damos cuenta de que el palazo económico puede ser de antología, ante esto un gobierno en quiebra como el PP ¿qué hace?, ¿tiene dinero (recortes aparte) para afrontar esto?, si lo tiene ¿qué medidas va a desplegar? y si no lo tiene ¿va a solicitar ayuda de la comunidad internacional para afrontar la crisis? (dinero, medicinas, equipos, médicos, enfermeras, campañas hacia la población, etc., como lo han hecho en otras ocasiones otros países en África), si lo va a hacer ¿cuándo lo va a hacer? y si no lo hace ¿por qué es, por orgullo?, que lo explique todo.