Marisa, de 62 años, perteneciente a los colectivos Oficina de Vivienda de Madrid, Grupo de Vivienda de la Asamblea Centro de Madrid yPatio Maravillas estaba amenazada por una orden de desaucio, según desvela periodismohumano.com. Tras trabajar durante 20 años en Estados Unidos, no le ha renta o pensión alguna. Ahora acumula una deuda de 10.000€ con el propietario de su vivienda y el IVIMA y la EMVS, encargados de la vivienda de protección en Madrid. No le han ofrecido solución alguna. El barrio donde vive Marisa consiguió aplazar la fecha de su desahucio por segunda vez, hasta el 14 de noviembre.