Aunque los premios literarios estén merecidamente denostados, solo algunos, como los nobel, permiten darnos a conocer a autores sepultados en el portentoso magma de la producción literaria en cuyas obras resplandece una viveza sutil pero infinita. La escritora surcoreana Han Kang, de 53 años, ha sido reconocida por la Academia que otorga el premio Nobel