
Era una entrevista que se presentaba tensa. Un colaborador del programa ‘FAQS’ de la Televisión autonómica catalana preguntó al candidato municipal del PP, Josep Pou, por su pasado ultra en la organización Fuerza Nueva. Bou respondió:»recordaréis seguramente a un periodista que se llamaba Vinader. Este señor era un delincuente. Este señor pagó con siete años de prisión. Lo que hizo es lo alguien pretende hacer ahora conmigo, y eso no me parece bien. Señaló a una persona que fue asesinada por ETA en pocos días, y la segunda, en semanas». Vinader fue el primer periodista que a mediados de los 70 en España se infiltró en grupos de extrema derecha. Sus reportajes de investigación y denuncia fueron un referente para comprender la descomposición del régimen franquista y las cañerías del Estado. La revista Hincapié acaba de editar en castellano el libro El Caso Vinader. El periodismo Contra La Guerra Sucia«, del periodista Xavier Montanyá. En este libro se rescatan los reportajes que Vinader hiciera en el País Vasco, destapando una trama ultra bajo la que se escondían organziaciones que serían el germen del sanguinario GAL.
«La extrema derecha llega allí donde la gente de uniforme no puede llegar», decía Vinader. En 1979 publicó en la revista Interviú dos reportajes sobre la extrema derecha en el País Vasco. Se trataba de una célula radicada en la ciudad de Barakaldo que actuaba violentamente bajo diferentes siglas: ATE, Batallaón Vasco-Español. Miembros civiles pero también de las fuerzas de seguridad formaban parte de la red ultra. Tras la publicación de los reportajes, ETA mató a dos de los individuos mencionados por Vinader. En 1981 la Audiencia española condenaría al periodista a siete años de prisión, por «imprudencia temeraria». Vinader se exilió y regresó a Cataluña tres años después. Fue el primer periodista español encarcelado en la joven democracia. Después de pasar tres meses encarcelado y en medio de una gran campaña internacional a favor de su liberación, fue indultado por el gobierno de Felipe González. Paradojas de la historia, bajo el mandato de Felipe González y de su primer gobierno, el terrorismo de estado recobraría una intensa y funesta actividad bajo las siglas del GAL.
Vinader entregó antes de morir su valioso archivo al Centro de Estudios Históricos Internacionales de la Universidad de Barcelona. Entre los papeles figura un listado antiguo de los afiliados a Fuerza Nueva en Barcelona en el que figura el ahora candidato por el PP Josep Bou.
La declaración de Josep Bou viene a significar la desmemoria política actual. Vinader fue sentenciado por un poder judicial plenamente insertado en el régimen franquista. Su inevitable indulto se debió no a las simpatías del gobierno ni su presidente con el periodista, sino a la más que evidente ausencia de responsabilidad en los asesinatos cometidos por ETA. Así lo describe con todo lujo de detalles el periodista Xavier Montanyá en El Caso Vinader. Pero el ejercicio de desmemoria es doble por cuanto el pasado ultra de Josep Bou es, además de desconocido, ignorado y minusvalorado.